miércoles, 2 de octubre de 2013

Tenía miedo...

Tenía miedo de estar solo: ¡Hasta que aprendí a quererme a mí mismo!
Tenía miedo de fracasar: ¡Hasta que me di cuenta que únicamente fracaso si no lo intento!
Tenía miedo de lo que la gente opinara de mí: ¡Hasta que me di cuenta que de todos modos opinarían de mí!
Tenía miedo de que me rechazaran: ¡Hasta que entendí que debía tener fe en mí mismo!
Tenía miedo de sentir dolor: ¡Hasta que aprendí que era necesario para crecer!
Tenía miedo de la verdad: ¡Hasta que descubrí la falsedad de las mentiras!
Tenía miedo de la muerte: ¡Hasta que aprendí que no es el final, sino más bien el comienzo!
Tenía miedo de sentir odio: ¡Hasta que me di cuenta que no es otra cosa más que la ignorancia!

Tenía miedo de hacer el ridículo: ¡Hasta que aprendí a reírme de mi mismo!
Tenía miedo de hacerme viejo: ¡Hasta que comprendí que ganaba sabiduría día a día!
Tenía miedo de mi pasado: ¡Hasta que comprendí que no podía herirme más!
Tenía miedo de la oscuridad: ¡Hasta que vi la belleza de la luz de una estrella!
Tenía miedo de cambiar: ¡Hasta que vi, que aun la mariposa más hermosa necesitaba pasar por una metamorfosis antes de volar!
Post: Leo H.

martes, 3 de septiembre de 2013

Lo que queda por descubrir

 " La vida es un viaje. Como las aves, algún día abandonaremos el nido de nuestra infancia para volar con nuestras propias alas. Descubriremos el amor, y la mayoría de las veces fundaremos una familia. (...) A lo largo del viaje de la vida, toparemos con muchos obstáculos. Podemos padecer una enfermedad, ver marcharse a un amor o morir a nuestros seres queridos. Nunca estaremos seguros de resolver las dificultades materiales de la existencia. También descubriremos lo difícil que es amar, las pocas posibilidades de encontrar un trabajo que nos llene profundamente, la frecuencia con que nos asaltan las contradicciones internas, los miedos, la rabia, las frustraciones, los celos, el desánimo. A lo largo de la vida deberemos aprender a vivir. No a sobrevivir, sino a vivir. A vivir plenamente, con los ojos bien abiertos, conscientes y atentos. Siendo capaces de elegir unas buenas personas con quienes compartir nuestra vida cotidiana, evitando cometer los mismos errores que en el pasado (...). Todo ello se aprende con el tiempo y la experiencia. Pero lo más valioso es tener una mente clara que nos guíe por el camino de la vida. Así evitaremos extraviarnos, cometer errores y llevarnos disgustos. "

                                                                              El alma del mundo, de Fréderic Lenoir

domingo, 30 de junio de 2013

LOS 10 LADRONES DE TU ENERGÍA:


1- Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un cubo para echar su basura, procura que no sea en tu mente.

2- Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle.

3- Cumple tus promesas. Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a re-negociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio.

4- Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas.

5- Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad.

6- Tira, recoge y organiza, nada te toma más energía que un espacio desordenado y lleno de cosas del pasado que ya no necesitas.

7- Da prioridad a tu salud, sin la maquinaria de tu cuerpo trabajando al máximo, no puedes hacer mucho. Tómate algunos descansos.

8- Enfrenta las situaciones tóxicas que estás tolerando, desde rescatar a un amigo o a un familiar, hasta tolerar acciones negativas de una pareja o un grupo; toma la acción necesaria.

9- Acepta. No es resignación, pero nada te hace perder más energía que el resistir y pelear contra una situación que no puedes cambiar.

10-Perdona, deja ir una situación que te esté causando dolor, siempre puedes elegir dejar el dolor del recuerdo.

DALAI LAMA

domingo, 19 de mayo de 2013

La luz de Nelson Mandela


ILUSTRACIÓN DE JOSÉ LUIS ÁGREDA
Después de 27 años en la cárcel y ser elegido en 1994 presidente electo de Sudáfrica, Nelson Mandela compartió con el mundo entero uno de sus poemas favoritos, escrito por Marianne Williamson: “Nuestro temor más profundo no es que seamos inadecuados. Nuestro temor más profundo es que somos excesivamente poderosos. Es nuestra luz, y no nuestra oscuridad, la que nos atemoriza. Nos preguntamos: ¿quién soy yo para ser brillante, magnífico, talentoso y fabuloso? En realidad, ¿quién eres para no serlo? Infravalorándote no ayudas al mundo. No hay nada de instructivo en encogerse para que otras personas no se sientan inseguras cerca de ti. Esta grandeza de espíritu no se encuentra solo en algunos de nosotros; está en todos. Y al permitir que brille nuestra propia luz, de forma tácita estamos dando a los demás permiso para hacer lo mismo. Al liberarnos de nuestro propio miedo, automáticamente nuestra presencia libera a otros”

viernes, 17 de mayo de 2013

LAS EMOCIONES COMO LENGUAJE


Comunicarse es expresar algo y recibir una respuesta. Todos “hablamos” otros lenguajes más allá de los que verbalmente practiquemos. El lenguaje corporal de los gestos y el lenguaje de las emociones son en verdad poco conocidos. Y no digo con esto que las personas no los usen para comunicarse, pero de la misma forma que los analfabetos pueden usar el lenguaje de las palabras todos podemos usar el de las emociones sin conocer sus estructuras y sus reglas.

Lenguaje es todo aquello con lo que me expreso y las emociones son expresiones que no solo se captan a simple vista sino que tiñen el idioma hablado o gesticulado con su presencia. Desde niños, hemos aprendido que cuando manifestamos una emoción nuestro entorno reacciona. Hemos aprendido que algunas veces necesitamos manifestar ciertas emociones conflictivas para que nos hagan caso. Y en nuestro deseo de controlar nuestro mundo hemos recurrido a la ira, la tristeza, la ansiedad y hasta a la soledad del aislamiento para provocar una reacción y así manipular a los que nos rodean.

No quiere esto decir que las emociones son siempre el resultado de una intención de manipular, pero es interesante preguntarse a uno mismo que beneficios me aporta manifestar mis emociones.
Las razones pueden ser otra dos desde mi perspectiva.

1- Soltar todo mi conflicto en otro para aliviarme yo.
2- Manifestar quien uno es por la necesidad de ser autentico.

              Elena Acitores Represa.                                                                     

martes, 14 de mayo de 2013

Cuando aprendas a considerar tu vida


Cuando aprendas a considerar tu vida y cuanto hay en ella como el milagro que es, comprenderás enseguida que quejarse es desperdiciar el milagro que eres.
Cada instante que pasas disgustado, desesperado, angustiado, furioso o dolido a causa del comportamiento de otra persona es un instante en el que renuncias al control sobre tu vida
Observa te a ti mismo y a los demás en este mundo disparatado, y después decide que es mejor, pasear por ahí la rabia o desarrollar un sentido del humor que te proporcionará a ti y al prójimo el más preciado de todos los dones: la risa.
En la vida todo es paradoja. Cuanto más desees la aprobación, más contundente será la negativa de los demás a aprobar te; cuanto menos te importe el que te aprueben o no, más aprobación conseguirás.
Cuando alcanzas suficiente paz interior y te sientes realmente positivo, es prácticamente imposible que otra persona te controle y te manipule.
Si eres feliz, si vives cada momento aprovechando al máximo sus posibilidades, entonces eres una persona inteligente.
Si crees totalmente en ti mismo, no habrá nada que esté fuera de tus posibilidades.
En verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas.
No necesitas admitir a nadie en tu vida a menos que llegue cargado de afecto y armonía.
El progreso y el desarrollo son imposibles si uno sigue haciendo las cosas tal como siempre ha hecho.
No dejes que los planes que tienes para ti sean más importantes que tú mismo.
¡Vive! ¡Ama! ¡Se Feliz!
WAYNE W. DYER
CUANDO APRENDAS A CONSIDERAR TU VIDA

Cuando aprendas a considerar tu vida y cuanto hay en ella como el milagro que es, comprenderás enseguida que quejarse es desperdiciar el milagro que eres.

Cada instante que pasas disgustado, desesperado, angustiado, furioso o dolido a causa del comportamiento de otra persona es un instante en el que renuncias al control sobre tu vida

Obsérvate a ti mismo y a los demás en este mundo disparatado, y después decide que es mejor, pasear por ahí la rabia o desarrollar un sentido del humor que te proporcionará a ti y al prójimo el más preciado de todos los dones: la risa.

En la vida todo es paradoja. Cuanto más desees la aprobación, más contundente será la negativa de los demás a aprobarte; cuanto menos te importe el que te aprueben o no, más aprobación conseguirás.

Cuando alcanzas suficiente paz interior y te sientes realmente positivo, es prácticamente imposible que otra persona te controle y te manipule.

Si eres feliz, si vives cada momento aprovechando al máximo sus posibilidades, entonces eres una persona inteligente.

Si crees totalmente en ti mismo, no habrá nada que esté fuera de tus posibilidades.

En verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas.

No necesitas admitir a nadie en tu vida a menos que llegue cargado de afecto y armonía.

El progreso y el desarrollo son imposibles si uno sigue haciendo las cosas tal como siempre ha hecho.

No dejes que los planes que tienes para ti sean más importantes que tú mismo.

¡Vive! ¡Ama! ¡Se Feliz!

WAYNE W. DYER

lunes, 8 de abril de 2013

Sé asertivo

Sé asertivo: pide lo que quieras y di lo que piensas.
Está demostrado que ser asertivo ayuda a mejorar tu autoestima.
Ser dejado y aguantar en silencio todo lo que te digan y hagan, genera tristeza y desesperanza.
Aprende a pedir y a decir lo que piensas con respeto hacia ti y hacia los demás.
NO cuando tengas que decir NO. Es cuestión de respeto hacia uno mismo.

miércoles, 3 de abril de 2013

Energía en movimiento



Sufrimos porque enfocamos nuestra energía en querer controlar todo lo de nuestro entorno para cambiarlo: la manera en que se comporta mi pareja, el pensar de mis hijos, el reaccionar de mi jefe, el sentir de la persona que me gusta, el estado del tiempo, las leyes de mi país, las decisiones del gobierno, las creencias de otras religiones, los hábitos de mi vecino etc. Al hacer esto renuncio al poder de controlar mi interior: Mis emociones, mis pensamientos, mis reacciones, mis interpretaciones, mis perspectivas, mis creencias, mis sentimientos, mis acciones, mis decisiones, mis no decisiones y mi poder de creación. Cuando retome este poder y acepte que mi entorno es un reflejo de mi interior es cuando podré cambiar lo que no me guste, porque mi energía se enfocará en sanar el origen de todo. Incluso el decidir no hacer nada conlleva una responsabilidad. La sanación de mi mundo comienza en mi.
 Namasté

lunes, 4 de marzo de 2013

Vive con convicción

Vacíate de culpas propias y ajenas y comienza a vivir con convicción. Sé tú mismo.
La convicción te permitirá revisar, modificar y cambiar lo que sea necesario cambiar y seguir adelante.

  Si te equivocaste, pide perdón.
Saber disculparse es un acto de grandeza, implica reconocer nuestros errores y cambiar la actitud. Si está en tu mano, repara tu equivocación y a tu grandeza se le sumará la paz.

 Mereces ser feliz.
Proponte disfrutar de todo lo que tienes, sabiendo que eres merecedor de todas las cosas buenas de la vida. Deshazte de las culpas falsas. Sólo eres responsable de tus decisiones, no de la ajenas.

 No quieras cambiar a nadie, sólo cambia quien decide cambiar.
La mejor manera de que el otro cambie es no queriéndolo cambiar.

                                                  Estracto del libro " Gente Tóxica"

domingo, 3 de marzo de 2013

¿Qué buscas?


Carl Jung cuenta en uno de sus libros una conversación que tuvo con un jefe indígena norteamericano que le señaló que tal como él lo percibía los blancos tienen caras tensas, ojos penetrantes y un porte cruel. Dijo "Están siempre buscando algo. ¿Qué están buscando? Los blancos siempre quieren algo. Siempre están incómodos e inquietos. No sabemos lo que quieren. Creemos que están locos".
La corriente subterránea de desasosiego constante comenzó mucho antes del surgimiento de la civilización industrial occidental, por supuesto, pero en la civilización occidental, que ahora cubre casi todo el globo, incluyendo la mayor parte del Este, se manifiesta en una forma aguda sin precedentes. Estaba ahí ya en la época de Jesús y también seiscientos años antes, en la época del Buda, y mucho antes. ¿Por qué están siempre inquietos? Preguntaba Jesús a sus discípulos. "¿Puede la preocupación añadir un solo día a su vida?" Y el Buda enseñó que la raíz del sufrimiento debe buscarse en nuestro continuo desear y ansiar.
La resistencia al Ahora como disfunción colectiva está intrínsecamente conectada con la pérdida de conciencia de Ser y constituye la base de nuestra deshumanizada civilización industrial. Freud, a propósito, también reconoció la existencia de esta corriente subterránea de desasosiego y escribió sobre ella en su libro El Malestar en la Cultura, pero no reconoció la verdadera raíz del desasosiego y no se dio cuenta de que es posible liberarse de él. Esta disfunción colectiva ha creado una civilización muy infeliz y extraordinariamente violenta que se ha convertido en una amenaza, no sólo para sí misma sino también para toda forma de vida sobre el planeta.

Eckhart tolle.

sábado, 2 de marzo de 2013

Historia de vida


Desde que tengo memoria, camino por un sendero, con una niña de vestido blanco en mi
espalda.
Me empuja y golpea para hacerme caminar, miro en todas las direcciones, nos
encontramos en un bosque hermoso, todos los que me rodean llevan a alguien guiándolos pero de
maneras distintas.
El tiempo siguió con su marcha, a pesar de rogar para que se detenga, en mi camino
aparecían obstáculos, algunos solo me pertenecían, en cambio otros abarcaban varios senderos.
Pero la niña no me permitía detenerme, sus golpes eran cada vez más fuertes.
Llegó el momento que la tortura se hizo insoportable, me obligó a correr fuera del
sendero, el bosque de claro y colorido se fue transformando en un pantano moribundo y
desolado.
Cuando logre por fin salir de ese espantoso lugar, me encontré con un prado árido por la
sequía, no había senderos pero a lo lejos se divisaba un objeto.
Al acercarme me di cuenta que el objeto no era más que un pozo muy profundo. En un
instante la niña apareció a mi espalda, al mirarla pude notar que lloraba, pero sin siquiera mediar
palabra me empujo al vacío.
Ese fue el golpe más doloroso de mi vida, en ese lugar a pesar de la total oscuridad podía
observar todos los obstáculos que simplemente salte o eludí, además podía sentir las voces de
personas, amigos y familia cuando caminaban cerca de la entrada del pozo.
Colapsé, nadie podía ayudarme no importa lo que me dijeran desde lo alto. Tomé mi
decisión, haría lo que fuese necesario para superarlo todo y simplemente sería feliz por mi propia
decisión.
Comencé a escalar, pero a medida que subía tenía que resolver los obstáculos que no me
permitían avanzar, después de mucho tiempo y un esfuerzo increíble, logré alcanzar la salida del
pozo, aunque aún me quedaban algunos problemas sin resolver.
Cuando por fin salí, me encontré en un lugar totalmente distinto, ya no era un lugar árido
y seco sino todo lo contrario, un campo lleno de flores cultivadas por las personas que intentaron
ayudarme a salir.
Me pare en el borde del pozo, donde se encontraba la niña de vestido blanco aun
llorando, nos miramos mutuamente por un tiempo, sonrió y rio emanando alegría como la de
un maestro al ver a su alumno aprender lo que con tanto esfuerzo enseñó. Se dio vuelta y se fue
saltando hasta que ya no logré verla, jamás la volvería a ver, ese fue el adiós para mi maestra de
vida.
Conclusión:
A todos nosotros la vida nos enseña, aunque de maneras muy distintas. Unas más crueles
que otras, algunos nos lleva a los golpes, a otros los lleva de la mano. Lo importante, lo que todas
estas maestras de vidas quieren enseñarnos es como debemos pararnos delante de ella, no
depende de nadie más que de nosotros mismos, por más que la vida nos lleve de la mano y nos
regale el mundo no serás feliz a menos que lo decidas.
Con respecto a los obstáculos o problemas, no sirve de nada pasarlos por un lado o
saltarlos, eventualmente tendrás un enorme camino de obstáculos que atravesar luego. Mucho
peor es recogerlos, terminarás cargando tanto peso (más si recoges los problemas de los demás)
que ni siquiera podrás moverte del camino. En la vida los problemas están hechos para ser
resueltos con su tiempo, pero dado el caso que el problema no tenga respuesta, que de hecho los
hay y muchos, no pierdas tu tiempo, simplemente muévelos de tu camino.
Lo más importante en esta vida ya sea que nos haya tocado el camino duro o el fácil, es
saber pararnos delante de ella y mostrar quienes somos y más importante, elegir como vamos a
vivirla, porque llegará el momento que miraremos para atrás.
                                                                         
                                                                                              Por Matias Happel

CARTA A LA VIDA


El cuerpo es sólo una máquina, una herramienta con la que nos
servimos para poder hacer esa cosa tan rara y sorprendente que es vivir. El
cuerpo es, a veces, el reflejo de la esencia misma de la vida, porque la vida
en realidad es algo abstracto, algo no visible y que está en todo lo que nos
rodea. No se trata de aprender, de saber,… si no de vivir, de saber que
tienes una realidad y una existencia; estás ahí. Pocos son capaces de darse
cuenta de esa realidad, el resto de las cosas son sólo condiciones, cosas, o
no sé cómo decirlo, que están ahí, formando parte, en nuestro caso, de
nuestra condición humana. No sabemos por qué, en el fondo tampoco
somos conscientes de que en realidad nos movemos involuntariamente por
esas condiciones, confundimos el concepto vida por esas condiciones.
Estoy de acuerdo con esas condiciones porque no elegí nacer, pero si vivir.
Esas condiciones son las que nos hacen sentir, amar, odiar,… si te lo tomas
bien puedes sentir la “felicidad” el “bienestar” ¿y qué es eso en realidad?
no lo sé, es la esencia por la que luchamos por vivir, el motor y sus
componentes que nos dan el sentido a esa cosa “mágica” e incompresible
que s la vida. Mis condiciones actuales están en tormenta, mis sentimientos
no son claros y están en guerra entre si para llevarse el papel protagonista.
¿Protagonismo?, ¿lucha? Me alegro al saber que todas esas cosas son sólo
condiciones, eso me da un arma potente para poder dirigir o enfocar por
donde quiero que vayan, pero ¡cuidado! Esas condiciones no son puestas
por nosotros, por lo tanto no son controlables pero sí guiables según tu
fuerza o ganas para llevarlas a ese estado de “bienestar” o “malestar”. Es
una lucha muy dura, esta la de la vida, pero depende de cada uno de
nosotros si le queremos dar un sentido o nos dejamos cegar por lo que
creemos que es en realidad, realidad que nos dicen que es sociedad.
Sociedad es otra de esas condiciones necesarias para nuestro “bienestar”,
sin ella, no conoceremos lo que es amar, lo que es odiar y otras muchas
emociones necesarias.
Esa ignorancia ante la vida es la que lleva a las sociedades a las
prohibiciones, a las imposiciones, y yo ya tengo decidido que acepto la
vida, que esa lucha para aprender a convivir con esas condiciones es
individual, y que si acepto esta vida es porque busco mi “bienestar”, ya que
soy yo la que siente. Sentir… Por ello en mis manos está el derecho a la
libertad, mi cuerpo es mío y el único ser que lo domina soy yo. Mi elección
ya está hecha, quiero amar y ser amada, necesito dar todo lo que tengo y
soy a esta sociedad, pero para seguir siendo dueña de mí misma seguiré
recordando siempre una de mis frases favoritas: “prefiero morir de pie que
vivir siempre arrodillada”. Esa es la única condición que le pongo a la vida,
la oportunidad de ser LIBRE.
                                                                          Autora : Emilia Sánchez Molina

viernes, 1 de marzo de 2013

Si hablara nuestra almohada...


Si nuestra almohada hablara, probablemente contaría muchas cosas, nuestros
sueños, pesadillas, nuestros desvelos y angustias, así como también cada una de
nuestras lagrimas que hemos depositado en la alcancilla del silencio, y de la cual
curiosamente perdimos la cuenta de ellas; o peor aún, nos hemos acomodado
acomodado fielmente a nuestros deseos frustrados o amores recordados,
hemos hecho de la almohada nuestra mejor confidente, día a día fantaseamos
con algo diferente a lo que nuestra realidad nos ofrece, y ese sueño se
convierte en una obsesión que muchas veces se apodera de nuestra alma y nos
desafía a lograr eso que tanto queremos lograr, hacer, o ser; tratando de
derribar todos los obstáculos que se nos presenten; pero al final nos damos
cuenta que tenemos que pagar un precio si queremos alcanzar ese sueño que
tanto anhelamos, y ese precio a veces nos permite ganar y otras perder; nos
aventuramos a un porvenir que desconocemos dejándonos llevar nuestro deseo,
decidimos emprender ese viaje aunque no siempre tenga un feliz retorno.
¿Qué viaje has emprendido para alcanzar ese sueño?, cual ha sido o es ese
precio que tienes que pagar por ver tu deseo realidad?
a veces tomamos ese vuelo sin saber que nos deparará, pensando que todo va a
ser felicidad, belleza, y prosperidad. Pero al final el precio de ese sueño
dependerán de cada una de las decisiones que tomemos, algunas de ellas nos
harán reír, otras llorar, amar o aborrecer, perdonar o condenar y morir o vivir;
y todas ellas las compartimos con nuestra almohada cada noche deseando que
hablara y nos diera un buen consejo, o lo que tanto queremos escuchar, quien
guarda el recuerdo de lo que fuimos, la realidad de lo que somos y el futuro de
lo que nuestras decisiones de hoy harán de nosotros mañana...
pero al final, siéntete feliz, si amas, lloras, y sueñas, eso significa que estás VIVO.
Autor: GLENDA ESMERALDA CABRERA MARTINEZ

martes, 26 de febrero de 2013

Cómo me relaciono


¿Colaboro en la libertad del otro y en la mía en cada una de mis relaciones? ¿Me siento libre en mis relaciones?
 
Somos entidades dinámicas y precisamos libertad en nuestra vida para poder manifestarnos de una forma genuina, creativa y responsable.
 
¿Uso la manipulación, como arma o como herramienta, para conseguir controlar a la otra persona?
 
La manipulación es un vicio común a través del cual gustosos infundimos sentimientos de culpa, sólo para poder gobernar los movimientos del otro. Este vicio está tan arraigado en nosotros que a menudo somos inconscientes de ello.
 
Una idea bastante común sobre el amor es que éste requiere sacrificio. Nada más lejos de la verdad. Cuando amo doy por el placer de dar y encuentro una recompensa en ese acto. Cuando tengo que dar sin ganas de amar, entonces es cuando si necesito del sacrifico. Cuando en una relación nos vemos obligados a llevar a cabo ciertos sacrificios para manifestar nuestro amor de forma que la otra persona lo entienda, o porque la otra persona así lo exige, estamos renunciando a esa libertad esencial para el desarrollo de nuestra personalidad, y además no estamos dando amor, estamos traficando con las emociones, dando “afecto” para que nos lo devuelvan.
 
Sentirme libre. Mostrar quien soy. Sin preocupaciones acerca del que dirán. Sin miedo a ser rechazada, sin miedo a no gustar. Sin sentirnos juzgados y sin juzgarnos a nosotros mismos es más placentero y diría que más fácil sino fuera tan difícil eso de dejar de juzgarse a sí mismos.
Cuando me muestro como soy, me acepto y me gusto, y lo transmito. Si yo me acepto y puedo mostrarme libre, ser autentico, entonces soy más atractivo porque ser autentico es atractivo. Así puedo encontrar más personas que me aceptan.
 
Cuando doy libertad al otro, aceptándole sin juicios, no solo el otro puede mostrarse sin miedo. Sino que también me estoy dando la libertad a mí mismo.
¿Colaboro en la libertad del otro y en la mía en cada una de mis relaciones? ¿Me siento libre en mis relaciones?

Somos entidades dinámicas y precisamos libertad en nuestra vida para poder manifestarnos de una forma genuina, creativa y responsable.

¿Uso la manipulación, como arma o como herramienta, para conseguir controlar a la otra persona?

La manipulación es un vicio común a través del cual gustosos infundimos sentimientos de culpa, sólo para poder gobernar los movimientos del otro. Este vicio está tan arraigado en nosotros que a menudo somos inconscientes de ello.

Una idea bastante común sobre el amor es que éste requiere sacrificio. Nada más lejos de la verdad. Cuando amo doy por el placer de dar y encuentro una recompensa en ese acto. Cuando tengo que dar sin ganas de amar, entonces es cuando si necesito del sacrifico. Cuando en una relación nos vemos obligados a llevar a cabo ciertos sacrificios para manifestar nuestro amor de forma que la otra persona lo entienda, o porque la otra persona así lo exige, estamos renunciando a esa libertad esencial para el desarrollo de nuestra personalidad, y además no estamos dando amor, estamos traficando con las emociones, dando “afecto” para que nos lo devuelvan.

Sentirme libre. Mostrar quien soy. Sin preocupaciones acerca del que dirán. Sin miedo a ser rechazada, sin miedo a no gustar. Sin sentirnos juzgados y sin juzgarnos a nosotros mismos es más placentero y diría que más fácil sino fuera tan difícil eso de dejar de juzgarse a sí mismos.
Cuando me muestro como soy, me acepto y me gusto, y lo transmito. Si yo me acepto y puedo mostrarme libre, ser autentico, entonces soy más atractivo porque ser autentico es atractivo. Así puedo encontrar más personas que me aceptan.

Cuando doy libertad al otro, aceptándole sin juicios, no solo el otro puede mostrarse sin miedo. Sino que también me estoy dando la libertad a mí mismo.
                                             Recogido de Potenciandote.com


lunes, 28 de enero de 2013

‎12 PASOS PARA SIMPLIFICAR TU VIDA


Leedlo, esta bien
12 PASOS PARA SIMPLIFICAR TU VIDA

1. ORDENA TU VIDA

Sentirás una gran oleada de inspiración cuando te deshagas de cosas que ya no son útiles en tu vida – Así que mientras menos posesiones necesites asegurar, cuidar, desempolvar, organizar y mover, más próximo estarás de ser libre.

2. ELIMINA DE TU AGENDA LAS ACTIVIDADES Y OBLIGACIONES INNECESARIAS E INDESEABLES

Dile “no” a las exigencias excesivas, y no te sientas culpable de inyectar una dosis de tiempo libre a tu rutina diaria.

3. ASEGÚRATE DE QUE TU TIEMPO LIBRE SEA LIBRE  

Pasar una tarde leyendo o escribiendo cartas, viendo una película con un ser querido, cenar con los hijos o hacer ejercicio, es más inspirador que asistir a un evento en el que suelen abundar las conversaciones inútiles.
 
4. SACA TIEMPO PARA LA MEDITACIÓN Y EL YOGA

Saca por lo menos 20 minutos diarios, siéntate en silencio y establece un contacto consciente con Dios 
 
5. REGRESA A LA SENCILLEZ DE LA NATURALEZA

No hay nada que sea más inspirador que la naturaleza, camina o acampa en el bosque; nada en un río, lago o en el mar; siéntate frente a una fogata, monta a caballo o esquía en la nieve. 
 
6. MARCA DISTANCIA ENTRE TÚ Y TUS CRÍTICOS

Dales una bendición silenciosa a quienes andan buscando defectos o son amigos de las confrontaciones y apártate de su energía tan rápido como sea posible.
 
7. SACA UN TIEMPO PARA TU SALUD

Recuerda que tu cuerpo es el templo sagrado donde vives durante esta vida, así que saca un poco de tiempo cada día y haz ejercicio
 
8. JUEGA, JUEGA, JUEGA

Simplificarás tu vida y te sentirás inspirado si aprendes a jugar en vez de trabajar toda tu vida.
 
9. DISMINUYE EL RITMO 

Cuando vayas en tu auto, disminuye la velocidad y relájate. Desacelera tu forma de hablar, tus pensamientos y el ritmo frenético de todo lo que haces. Dedica más tiempo a escuchar a los demás; sé consciente de tu inclinación a interrumpir y a dar por terminadas las conversaciones, y opta más bien por escuchar. Detente y aprecia las estrellas en una noche despejada, o las formas de las nubes en un día gris. Siéntate en un centro comercial y observa cómo todas las personas parecen ir deprisa y sin rumbo alguno.
 
10. HAZ TODO LO POSIBLE PARA EVITAR LAS DEUDAS

Recuerda que estás intentando simplificar tu vida, así que no necesitas comprar objetos que la complicarán y la trastornarán. Si no puedes adquirirlos, olvídate de ellos hasta que puedas hacerlo; al contraer deudas, sólo agregas más capas de ansiedad a tu vida.
 
11. OLVÍDATE DEL VALOR EFECTIVO

No te niegues a los placeres de la vida por razones monetarias; no determines tus compras por el hecho de obtener un descuento, y no te prives de sentir alegría porque no te hicieron una rebaja.
 
12. ACUÉRDATE DE TU ESPÍRITU

Si la vida te parece muy compleja, rápida, desordenada, frenética o difícil, acuérdate de tu propio Espíritu. Estás enca¬minado a la inspiración, un lugar sencillo y pacífico en donde estás en armonía con la sincronización perfecta de toda la creación. Viaja mentalmente allí y detente con frecuencia para recordar lo que realmente quieres.

WAYNE DYER

1. ORDENA TU VIDA

Sentirás una gran oleada de inspiración cuando te deshagas de cosas que ya no son útiles en tu vida – Así que mientras menos posesiones necesites asegurar, cuidar, desempolvar, organizar y mover, más próximo estarás de ser libre.

2. ELIMINA DE TU AGENDA LAS ACTIVIDADES Y OBLIGACIONES INNECESARIAS E INDESEABLES

Dile “no” a las exigencias excesivas, y no te sientas culpable de inyectar una dosis de tiempo libre a tu rutina diaria.

3. ASEGÚRATE DE QUE TU TIEMPO LIBRE SEA LIBRE

Pasar una tarde leyendo o escribiendo cartas, viendo una película con un ser querido, cenar con los hijos o hacer ejercicio, es más inspirador que asistir a un evento en el que suelen abundar las conversaciones inútiles.

4. SACA TIEMPO PARA LA MEDITACIÓN Y EL YOGA

Saca por lo menos 20 minutos diarios, siéntate en silencio y establece un contacto consciente con Dios

5. REGRESA A LA SENCILLEZ DE LA NATURALEZA

No hay nada que sea más inspirador que la naturaleza, camina o acampa en el bosque; nada en un río, lago o en el mar; siéntate frente a una fogata, monta a caballo o esquía en la nieve.

6. MARCA DISTANCIA ENTRE TÚ Y TUS CRÍTICOS

Dales una bendición silenciosa a quienes andan buscando defectos o son amigos de las confrontaciones y apártate de su energía tan rápido como sea posible.

7. SACA UN TIEMPO PARA TU SALUD

Recuerda que tu cuerpo es el templo sagrado donde vives durante esta vida, así que saca un poco de tiempo cada día y haz ejercicio

8. JUEGA, JUEGA, JUEGA

Simplificarás tu vida y te sentirás inspirado si aprendes a jugar en vez de trabajar toda tu vida.

9. DISMINUYE EL RITMO

Cuando vayas en tu auto, disminuye la velocidad y relájate. Desacelera tu forma de hablar, tus pensamientos y el ritmo frenético de todo lo que haces. Dedica más tiempo a escuchar a los demás; sé consciente de tu inclinación a interrumpir y a dar por terminadas las conversaciones, y opta más bien por escuchar. Detente y aprecia las estrellas en una noche despejada, o las formas de las nubes en un día gris. Siéntate en un centro comercial y observa cómo todas las personas parecen ir deprisa y sin rumbo alguno.

10. HAZ TODO LO POSIBLE PARA EVITAR LAS DEUDAS

Recuerda que estás intentando simplificar tu vida, así que no necesitas comprar objetos que la complicarán y la trastornarán. Si no puedes adquirirlos, olvídate de ellos hasta que puedas hacerlo; al contraer deudas, sólo agregas más capas de ansiedad a tu vida.

11. OLVÍDATE DEL VALOR EFECTIVO

No te niegues a los placeres de la vida por razones monetarias; no determines tus compras por el hecho de obtener un descuento, y no te prives de sentir alegría porque no te hicieron una rebaja.

12. ACUÉRDATE DE TU ESPÍRITU

Si la vida te parece muy compleja, rápida, desordenada, frenética o difícil, acuérdate de tu propio Espíritu. Estás enca¬minado a la inspiración, un lugar sencillo y pacífico en donde estás en armonía con la sincronización perfecta de toda la creación. Viaja mentalmente allí y detente con frecuencia para recordar lo que realmente quieres.

WAYNE DYER

lunes, 14 de enero de 2013

No evites los problemas, ¡resuélvelos!

En mi recorrido por la web he encontrado un tema a tratar que me parece muy interesante, sobre todo para aplicarlo en nuestra vida cotidiana. Os prometo que funciona.
Hay algo que tenemos que interiorizar y tener muy claro sí o sí y es que no se puede evitar que los problemas, las dificultades y la lucha, formen parte de la vida.
"La mayoría de las personas gastan más tiempo y energía, dándole la vuelta a los problemas en lugar de tratar de resolverlos". Henry Ford.
La consecuencia de vivir una vida infeliz no viene de los problemas que se nos plantean a lo largo de la vida, la mayoría de las veces la infelicidad tiene que ver con el color del cristal con que se miren y la perspectiva desde la cual se ven los problemas.
Las personas que logran superar las dificultades y logran el éxito es porque saben cómo manejar o resolver los problemas cuando llegan y no permiten que emociones negativas como el enfado, la duda, el miedo o la ansiedad obstaculicen la habilidad de pensar en las soluciones y dar el primer paso.
"No te quedes a merodear en lo que salió mal, en lugar de eso, enfócate en el siguiente paso que tienes que dar. Utiliza tus energías para moverte hacia encontrar la solución". Denis Waitley.
Si te paralizas y te deprimes ante las dificultades que llegan cada día a tu vida, prueba prueba a poner en práctica estos pasos para resolver el problema. Pueden resultar muy provechosos.
1.- Identifica uno a uno todos los problemas que te están molestando y deja de sentirte enfadado,asustado o ansioso. Reflexiona.
2.- Enfrenta tus problemas, se fuerte y échale valor.
3.- Resuelve tus problemas cogiendo el toro por los cuernos y enfocándote en encontrar las soluciones.
4.- Sigue adelante y deja ir el problema una vez que esté resuelto. No le des más vueltas y deja de pensar en él.
5.- Recuerda las lecciones aprendidas esforzándote por descubrir lo positivo de las experiencias difíciles.
6.- Nunca dejes que los problemas se conviertan en una medida de tu valor como persona.Tú siempre serás tú, una persona única, valiosa y merecedora de todo lo bueno, tengas o no problemas en tu vida.
7.- La mejor manera de prepararse y estar listo para los problemas es aceptar que son parte de la vida.

Yo creo firmemente en que las dificultades que se nos presentan a lo largo de nuestra existencia son retos y oportunidades de aprendizaje que, una vez superados, nos hacen desarrollarnos como seres humanos y verdaderas personas.